Father's Day: El regalo perfecto, el día perfecto

Hoy es uno de esos días que 'inventó El Corte Inglés' pero que todos utilizamos como perfecta excusa para demostrar lo que queremos a nuestro padre y tener algo más que un detallito. Soy bastante conformista con la idea de celebrar (o no) días como San Valentín, día del padre, de la madre, de la abuela, de la hermana, de la sobrina, de la vecina. Depende de si apetece o no, pero eso de tener la obligación, uf...

En mi caso como mi padre y yo vivimos relativamente lejos, siempre he hecho algo por que este día él también lo celebre. Cuando era pequeña lo que más hacía era dibujar, dibujar y dibujar así que todos sus regalos eran dibujos,cartas, fotografías, manualidades, y le gustaba, le gustaba porque aún los tiene guardados.

Este año lo tengo dificil para regalarle algo, primero no vamos a pasar el fin de semana juntos y segundo, lo típico, tiene de todo o eso cree. Aun así he pensado en qué me gustaría regalarle....Mi regalo perfecto sería un día perfecto en Barcelona, que es donde vive mi padre. Sí, solo me gustaría estar allí, esto es así. Cuanto menos tienes a alguien más necesitas estar con ese alguien.

Mi padre siempre empieza el día haciendo deporte, y siempre termina la mañana repitiendo una y otra vez el número de kilometros que ha conseguido hacer con su bici, es muy gracioso porque se asegura de que recuerdes que 'hoy he hecho un nuevo record, 40 kilómetros en 1 hora", se encanta. Por eso voy a empezar mi father's day corriendo unos kilómetros por la playa con él, voy a aprovechar el lujo de tener la playa cerca.

Para reponer fuerzas me encantaría ir a comer a un japonés y atiborrarme de sushi. Se me ha ocurrido porque hace dos veranos nos fuimos a hacer un tour por Florida. Estubo bien, fueron casi 4 semanas de 'vida americana', conocer sitios nuevos, tomar el sol y pisar todas las playas de la costa de Miami, ir a ver a Mickie, a Orlando, everglades, blablabla, y comer mucho, pero mucho muchísimo. Me puse morada a comer sushi, a todas horas. Amaba el sushi y los frapuchinos embotellados que vendían en los suepermercados usenses. ¿Por qué no hay de eso en España? Allí había una sección cual carnicería en la que te preparaban sushi al gusto, de verdad ¡qué gozada! Así que mi snack era el sushi, los frapuchinos de starbucks (del super) y los batidos de Nesquik, nada que ver con el de España.



En fin dejando a un lado temas de producción e importación , que me voy por las ramas que no voy a poder resolver, me conformo por el momento con ir a comer a ON sushi, un restaurante japonés de Barcelona. Es una forma de poder pasar el tiempo juntos y ponernos al día de todo. ¿A que es buena idea? Si a vuestros padres no les gusta este tipo de restaurantes, solo tenéis que encontrar el que se adapte a su gusta y voilà, velada perfecta.





Si aun así no parece suficiente, siempre está la opción del regalito de siempre: un pijama, unas zapatillas de andar por casa, un ticket regalo de La casa del libro. Este año he pensado que le vendría bien renovarse un poco, y aunque pasa bastante de las nuevas tecnologías y es muy dado a apagar el móvil durante el 80% de su día. (confieso que esto no deja de sorprenderme)...un ipad a lo mejor le motiva más a engancharse a ¡lo nuevo! ¿Qué padre se va a quejar de un regalo así? Aunque quiera no puede decir que no.



Para complementar el regalo/azo un buen libro nunca falla. Es dificil, le encanta la literatura histórica y cualquier libro sobre combates/aviones/soldados/hitos históricos. Sí, es difícil comprar un libro con la total seguridad de que le va a encantar. Pero creo que con alguno de los últimos de César Vidal acierto.

Ah! Se me ha olvidado incluir en el pack las dosis necesarias de besos y abrazos empalagosos que se deben dar a los padres sí o sí, nunca será suficiente.

Conclusión: Si queréis a vuestro padre darle un beso y un abrazo de buenos días como si no hubiera mañana, compartir alguna actividad que le guste, salir por vuestra ciudad a comer en algún sitio nuevo, comprarle algún detallito y ya sabéis...Besos y abrazos en cantidades industriales.