Como buena Valenciana, adoro las fallas y a pesar de que llevo tres años viviendo en Madrid de momento no me ha surgido nada lo suficientemente importante como para pasar por alto la semana fallera.
Una vez al año Valencia se convierte en un auténtico caos, la población de repente se multiplica, el ruido es constante, música, petardos, monumentos falleros, las calles se cortan para servir de escenario de las mejores fiestas del año.
Una vez al año Valencia se convierte en un auténtico caos, la población de repente se multiplica, el ruido es constante, música, petardos, monumentos falleros, las calles se cortan para servir de escenario de las mejores fiestas del año.
Con la ‘Cridà’ han empezado las fallas 2010. A partir de hoy y hasta el 19 de Marzo, todo el mundo debe acercarse a la costa para vivir qué son las fallas. Quién lo conozca sabrá que toda la ciudad se convierte en un enorme espacio de continuo alboroto, repito…casi 24 horas de no parar. Por unos días le damos la patada a los planing rutinarios y el horario se descontrola. Nadie sabe cuando se va a acostar, ni las horas que va a dormir, de repente las paellas multitudinarias se multiplican y la venta de chocolate con buñuelos a cualquier hora sigue como tradición.
Pero la fiesta y el ambiente fallero no lo son todo en estas fiestas. Los que son falleros innatos, sacan su traje fallero, se ponen los moños y disfrutan al máximo de la ofrenda a la patrona de Valencia, del concurso dónde se decide cual es la mejor falla (monumento fallero), de todos los eventos organizados por todas las comisiones falleras de Valencia, de las que también podemos disfrutar los que no pertenecemos a ninguna comisión.
No me olvido evidentemente de la ‘mascletà’, de los castillos de fuegos artificiales que se celebran del 15 al 17 y de la ‘nit del foc’, ésta es una de las cosas que más disfruto de todas las fallas.
Hace casi dos meses que no piso Valencia porque entre unas cosas y otras me ha sido imposible y hace más o menos dos meses que estoy con morriña de todo eso. Y ahora que se acerca todo esto más aún. El día 12 por fin! Voy a empezar a disfrutar de lo bueno, pero hasta entonces mi rutina está dándome toques de atención continuamente y el calendario me recuerda que el día 11 tengo un examen que tengo que aprobar.
Ya os contaré como ha ido todo, hasta entonces pasarlo bien.
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