lunes, 30 de noviembre de 2009

Pongamos que hablo de Madrid…

Hace dos años más o menos que me instalé en Madrid. Cambiar radicalmente de estilo de vida no suele ser fácil, pero con el paso del tiempo me he dado cuenta de que por lo visto Madrid no se me queda tan grande como yo pensaba. Quiera o no quiera esto es un hecho, aunque sólo sea madrileña de bote he aprendido a querer todo esto.

Gran Vía
Parece que a finales de noviembre cuando el invierno se hace notar, Madrid gana encanto, si…he conseguido encontrárselo. Sinceramente no se cómo explicar el porqué, pero parece más bonito, yo al menos lo disfruto más o al menos lo intento. Como en todas las ciudades, hay mil rincones no muy escondidos que no están mal ver aunque sólo sea una vez, pero hay que saber buscar.

Uno de esos rincones dónde no está mal pasar alguna tarde que otra, sobre todo cuando los termómetros en la capital marcan 3 ºC, es Lolina. Una cafetería cerca de la calle Fuencarral que huyendo de las típicas cadenas tipo VIPS, marca la diferencia fiel al estilo retro español.
Os aconsejo que os paséis aunque sólo sea para echar un vistazo, conocer sitios nuevos nunca está de más.
Y así es como estoy aprendiendo a disfrutar de mi viaje, de la vida que sin darme apenas darme cuenta me he montado aquí en cuestión de dos años. Haciendo de más lo que hacía de menos.

Al principio no fue muy fácil que digamos, pero hoy por hoy el salir a caminar y disfrutar de toda esta oportunidad que la vida me ha concedido, se ha convertido en un imprescindible. Aquí todas las puertas a las que he llamado se me han abierto y toco madera que siga siendo así. Y si la vida, el destino, la suerte ¡lo que sea! Te brinda oportunidades más vale no desaprovecharlas. Porque las oportunidades son como los amaneceres si esperas mucho…te los pierdes. Así que más vale subir al tren y disfrutar del viaje.

Cada uno sigue un norte aunque eso suponga dejar un poco apartadas otras cosas, que no renunciar. Hay un video que me hace mucha gracia porque representa exactamente lo que he dicho más o menos.




Allá donde se cruzan los caminos
Donde el mar no se puede concebir
Donde regresa siempre el fugitivo
Pongamos que hablo de Madrid, de Madrid
Joaquín Sabina

1 comentario:

  1. So great. I really apreciate your words because they give me strength. Going to a diferent place to live must be very hard for anyone. I'd like to do something like that. Maybe in the future. But it seems that you need courage...( I have just a little of that). Nevertheless, you've showed the opposite, and i admire you because of that.
    I wish you good luck, as much as you deserve!
    Kisses

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